miércoles, 2 de junio de 2010

¿¿¿Qué es el divorcio???


Aún se cree que un hijo estará mucho mejor en una familia donde los padres viven felizmente casados, esto no siempre es así ya que existen familias en las cuales los padres siempre discuten y se insultan delante de los hijos y esto a los niños les afectará a corto o a largo plazo en su desarrollo. El divorcio disminuye discusiones y muchas veces puede ser beneficioso, cuando ya no se encuentra otra alternativa. La peor situación es la que aún después del divorcio los padres siguen discutiendo frente al niño, y es lo que se debe evitar.
En pocas palabras puede decirse que el divorcio es la disolución del matrimonio por ruptura del vínculo y la suspensión de la vida en común de los cónyuges, pero ambas partes deben estar de acuerdo en vivir separadas, aunque no siempre es así. El divorcio requiere de tres separaciones para que sea completo. Por un lado, se procede a la disolución legal del contrato matrimonial. Desde un punto de vista social, ambas partes deben estar de acuerdo en vivir separadas y, desde un punto de vista emocional, deben renunciar a la nostalgia o al deseo de volver a estar juntos. Esta última separación es la que suele durar más.

Causas de un divorcio


Las causas que pueden producir una separación son múltiples, depende de la naturaleza de su relación, las circunstancias de cada uno de ustedes como cónyuges, problemas económicos, familiares, los hijos, etc. pero entre los problemas más frecuentes en toda relación de pareja destacan:

1.Problemas de comunicación
2.Discusiones destructivas
3.Sentimiento de abandono
4.Rutina
5.Decepción

Tipos de divorcio

Existen tres formas de disolver el vínculo matrimonial en México:
1-DIVORCIO ADMINISTRATIVO
Uno o los dos cónyuges podrán presentar la solicitud de divorcio sin necesidad de señalar la causa. Los únicos requisitos serán que haya transcurrido al menos un año de haberse celebrado el matrimonio civil, no haber concebido hijos ó teniéndolos que estos sean mayores de 30 años y no posean alguna incapacidad, y que exista un convenio entre las partes para regular las consecuencias inherentes a la disolución del vínculo. Se realiza en el Registro Civil.
2- DIVORCIO VOLUNTARIO
Los cónyuges que no se encuentran en el supuesto anterior, esto es: cuando tienen hijos menores ó mayores de edad, el que no hayan liquidado la sociedad conyugal, pero que se encuentran de acuerdo en divorciarse, y tienen más de un año de casados. Se realiza ante el Juez Familiar o Civil, y no ante el del Registro Civil.
3-DIVORCIO NECESARIO
No existe el consentimiento por parte de uno de los cónyuges. Este tipo de divorcio se da generalmente cuando uno de ellos no quiere deshacer el vínculo matrimonial. Se realiza ante el Juez Familiar ó Civil.

Relaciones tras un divorcio


COMPAÑEROS PERFECTOS- Usted puede continuar con una buena relación de amistad con su exesposo y compartir decisiones importantes acerca de su o sus hijos.
COLEGAS COOPERATIVOS- En este tipo de relación no existe ningún tipo de amistad, pero aun así coopera por el bienestar de los hijos.
SOCIOS FURIOSOS- Cuando se da esta relación, se forma un muro de ira, que afecta bastante a la relación y a la capacidad de cooperación, que se debe tener para poder sobrellevar la situación de la mejor manera sin afectar a sus hijos.
ENEMIGOS FEROCES- Aquí usted está tan enfrascada en su enojo, que no existe colaboración alguna.
DUOS DISUELTOS- Simplemente no hay contacto tras el divorcio.

Efectos del divorcio en mi hijo


Los niños pueden creer que son la causa del conflicto entre sus padres. Muchos niños tratan de hacerse responsables de reconciliar a sus padres y muchas veces se sacrifican a sí mismos en el proceso. La pérdida traumática de uno o de ambos padres debido al divorcio puede hacerlos vulnerables a enfermedades físicas y mentales. Los efectos son:

Depresión

Se sienten profundamente solos, ya que la crisis abarca a la familia extendida y estos tienden a alejarse, por temor a verse implicados en el proceso. También los padres están muy preocupados por sí mismos, deprimidos y desorientados, y emocionalmente están poco disponibles para sus hijos en esa fase inicial.

El síntoma mas importante de la depresión infantil que usted puede identificar en su hijo es un cambio permanente caracterizado por irritabilidad que puede llegar a la agresividad verbal o física dirigida a los demás, y en casos muy graves dirigida a él mismo, es frecuente que se agregue resistencia a seguir las indicaciones que antes realizaba sin problemas tanto en casa como en la escuela.

Estrés: trastorno del sueño y del hambre
La obligación de usted como madre es cuidar el bienestar de su hijo. Si el niño parece tener indicios de estrés, debe consultar con su médico de familia o pediatra para que lo refiera a un psicólogo. La presencia de alteraciones del sueño provoca que a los niños se les dificulte conciliar el sueño o este sea interrumpido durante la noche provocando dificultades para levantarse por la mañana o para realizar sus actividades diarias, puede que usted observe en su hijo fatiga física o movimientos lentos. Las variaciones en el apetito en la depresión lleva a los niños a disminuir la ingesta de alimentos y en ocasiones la aumenta, provocando pérdida o ganancia de peso en poco tiempo.

Conductas regresivas
Llamamos regresiones a la aparición de ciertas conductas que se consideraban superadas en el desarrollo evolutivo. Por ejemplo, es muy frecuente que aparezca enuresis (incontinencia urinaria), vuelta al gateo, retraimiento a un lenguaje infantil, etc.

Impacto emocional

1-Temor, una profunda sensación de pérdida y tristeza.

2-Pueden llorar tanto por un padre afectivo como por un padre indiferente.

3-Preocupación por el bienestar de sus padres.

4-Manifestar echar de menos al padre que se ha ido y temen no volver a verlo.

5-Sentimientos de rechazo.

6-Al tener que marcharse uno de los padres los niños interpretan como que son ellos los abandonados.

7- Se sienten ignorados e impotentes frente a la decisión de sus padres.

¿Cómo afecta dependiendo de la edad?

Bebés
Es posible que ellos presenten las siguientes conductas:
De 0 a 12 meses: son caprichosos, muestran irritabilidad, tristeza o insensibilidad, que constituyen respuestas al estrés y la depresión materna.
De 1 a 2 años: presentan llanto descontrolado, dificultades para estar lejos de la madre aunque sea por un momento, porque la necesitan cerca para sentirse seguros, el uso de sustitutos maternos como frazadas o muñecos de peluche, además de dificultades para irse a dormir o permanecer dormidos.
Niños de edad preescolar
-La total dependencia física y psíquica de sus padres, hace más fuerte el temor al abandono.
-Conforme a sus posibilidades intelectuales, pueden pensar que si un padre ha desaparecido, el otro también puede desaparecer fácilmente.
-Dada su dependencia, sus temores, su comprensión limitada de los acontecimientos familiares y su incapacidad para tranquilizarse a sí mismos, pueden reaccionar mal ante el divorcio.

Niños de edad primaria
Niños de 6 a 8 años
-No pueden concentrarse en la escuela, agreden a sus pares y/o se aíslan.
-Prevalecen en ellos las sensaciones de pérdida, rechazo y culpa.
-Les preocupa mucho perder al padre no conviviente y ser reemplazados.
-Aprovechan la competencia de los padres por su afecto y lealtad, e instrumentan conductas manipulativas.
-Pueden mostrar una excesiva responsabilidad.
Niños de 9 a 12 años
-Enfrentamiento con los padres y aliarse con uno de ellos para atacar al otro.
-Inseguridad, la cual los hacen proclives a las alianzas propuestas por sus padres.
-Preocupación por sus padres, por lo que se empeñan en ayudarlos.

¿¿¿Qué hacer???


En algunos casos es muy importante que usted junto con su expareja adopten los mismos puntos de vista, en cuanto a la supervisión de ejercicios regulares para remediar alguna situación especial del niño y es bueno que los dos hablen sobre el tema para llegar a un acuerdo.

Estos son algunos aspectos que pueden ayudar para que su hijo no sufra demasiado antes, durante y después el divorcio.

- Decidir junto con su esposo quien comunicará la noticia y acordar que se dirá.
-Deben cumplir lo que promete, es muy importante.
-Fomentar relación estable entre niño y padre.
-Mantener la responsabilidad del padre, y usted su responsabilidad de madre.

-Prometa a su hijo que continuará una buena relación con su papá y que se le mantendrá fuera de los conflictos que surjan.
- Posponga las decisiones importantes y definitivas hasta sentirse mejor para pensar claro.

-Su hijo debe enterarse cuando la decisión del divorcio está firmemente tomada, y con anticipación al día en que su padre que se va del hogar se mude.
-Explíquele claramente. Los niños necesitan entender de qué se trata el divorcio.
-Explíque también las razones de su divorcio, pero sin entrar en detalles como infidelidades o problemas sexuales.
-Exprese la tristeza que le genera su divorcio, porque esto les permite a los niños expresar sus propios sentimientos.
-Dígale que ellos no son responsables de la separación y que no está en sus manos recomponer el matrimonio.
-Comunique que sabe que va a sufrir y que lamenta causarle ese sufrimiento.
-Hágale saber, si ha sido así, que el fue uno de los mayores placeres del matrimonio y, si es verdad, que en el pasado hubo amor en su matrimonio.
-Ayúdelo a entender que todos deben ser valientes, y que es una crisis a afrontar para toda la familia.
-Deje a su hijo opinar sobre las decisiones a tomar, aunque no sea el quien decida.
-Su hijo tiene todo el derecho a amar a ambos padres, por lo que usted tiene que recalcarle que el divorcio es un problema entre adultos.